Los tumores de páncreas pueden ser producidos por células endocrinas o exocrina y están asociados a diferentes factores de riesgo. Los síntomas más frecuentemente asociados son la ictericia (tinte amarillo de la piel y de los ojos), dolor abdominal, pérdida de peso, diabetes y obstrucción gastro-intestinal. Su detección se realiza a través de estudios de imagen como la tomografía computerizada, la ecografía o la resonancia magnética.
En su manejo se utilizan distintas técnicas combinadas, en función de tipo de tumor y su extensión, como cirugía, quimioterapia, radioterapia, radiocirugía, terapias dirigidas e inmunoterapia, así como tratamientos paliativos.
El cáncer de páncreas se puede tratar con técnicas de radioterapia avanzadas de gran precisión como la Radioterapia de Intensidad Modulada (IMRT) en cualquiera de sus variantes o la Arcoterapia Volumétrica Molulada (VMAT) y contando con una comprobación diaria del tratamiento mediante Pruebas de Imagen (IGRT) para administrar una dosis que pueda eliminar el tumor y a la vez proteger lo mejor posible el tejido sano alrededor, permite dar simultáneamente diferentes dosis en diferentes áreas (boost integrado simultaneo o SIB). También permite aumentar la dosis por fracción disminuyendo el número de total de sesiones (Hipofraccionamiento) que si se hace en sesión única se llama radiocirugía(SRS) y si se utilizan muy pocas sesiones y con la ayuda de coordenadas estereotácticas se denomina Radioterapia Estereotáctica Corporal (SBRT).
Es importante el diagnóstico precoz y el abordaje de estos tumores con un equipo médico multidisciplinar y altamente experimentado. El Centro 360 de Excelencia Oncológica GCCC se halla en vanguardia de los tratamientos con un grupo de especialistas de nivel internacional.